La Habana, Cuba.- Aunque la victoria 1 x 0 va a la cuenta del equipo, en realidad, el protagonismo principal correspondió al serpentinero derecho Ismel Jiménez, hoy por hoy uno de los mejores del campeonato.

La poderosa ofensiva de Ciego de Ávila apenas pudo batearle dos sencillos, salidos de los bates de Mario Vega y Ricardo Bordón, en espesa lechada de nueve entradas para apuntarse el sexto triunfo de la justa frente a un revés.

Los espirituanos de Juan Castro solo presentan 14 triunfos en 33 salidas, dentro y fuera de casa, a pesar de poseer el mejor cuartero de bateadores de la actual contienda.

Sus parciales no atinan a comprender qué sucede y el mentor tampoco encuentra la respuesta lógica a la interrogante. Los números hablan solos y ponen a la vista de los preocupados que con (272) como promedio de bateo, (5.74) en el pitcheo y (968) en la defensa no es posible aspirar a la clasificación.

De acuerdo a la realidad del certamen, las posibilidades clasificatorias de Sancti Spíritus solo se mantienen latentes por jugar en la zona occidental, pues en el territorio oriental estarían ubicados muy cerca del sótano a 12 juegos completos separados de Villa Clara. ¿Quedan dudas?

De todas formas, la sorpresiva entrada al ruedo de Metropolitanos constituye para ellos un claro aviso, en caso de consolidar la estabilidad, aspecto que la tropa de Juan Castro está obligada a conseguir antes de que el calendario cumpla justa mitad.