La Habana, Cuba.- Los yumurinos se soltaron a batear entre el cuarto y el quinto capítulos para pisar seis veces la goma, lo cual permitió asumir el dominio de las acciones contra un equipo Granma, llegado al territorio con malas intenciones.

El escuadrón de Osvaldo Avilés llevaba cuatro triunfo y dos reveses en los enfrentamientos precedentes contra Industriales y La Habana, poderosas razones para pensar en la posibilidad de pasar la escoba.

Sin embargo, el supuesto bocadito se atravesó en la garganta y al final el marcador reflejó derrota 5 x 3, aunque al perder Guantánamo los tres juegos de la subserie frente a los de la Isla, siguen hundidos hasta el cuello en las profundidades del río Guaso.

Matanzas aprovecha cuantas brechas encuentran delante y, paso a paso, consigue alejarse del oscuro sótano custodiado por Cienfuegos, equipo que no puede levantar cabeza en terreno propio ni ajeno.

Por supuesto, tampoco granmenses y matanceros disponen de suficiente potencial para aspirar a la clasificación, de ahí que los graderíos de la instalación matancera, en la fría noche invernal apenas recibió un centenar de valientes seguidores de la causa local.