Sarahí García Contreras
Periodista de Radio Rebelde
El Cabildo de nación: un viaje a nuestras raíces afrocubanas
10 de Enero de 2009, 10:40 a.m.
La Habana, Cuba.- Entre los temas abordados en el décimo tercer Taller de Antropología Social y Cultural Afroamericana, se le reservó un lugar especial al surgimiento y evolución de los cabildos en Cuba así como a sus más disímiles modalidades que ha ido adquiriendo a lo largo de los siglos.
La conferencia que estuvo tutoreada por la presencia de la ensayista e investigadora cubana María del Carmen Barcia, sirvió para esclarecer la significación del término que, en el caso de nuestra Isla, revistió variadas acepciones como cabildo africano, de negros o de nación.
Hay que aclarar que el cabildo africano, que fungía como junta o asociación, no tiene el mismo significado ni función que el cabildo como institución urbana, que impuso España en las sociedades de América Latina en la época de la colonia, el cual se ocupaba de las cuestiones gubernamentales y administrativas de las ciudades en las que se enclavaba, además de poseer plena jurisdicción sobre todo ese territorio.
Pues aclarada esta cuestión de términos, se hace necesario subrayar que el cabildo africano o casa templo o de santo, como hoy también se le conoce, servía para aunar las diversas religiones africanas venidas a Cuba, producto al proceso de conquista y colonización, cuya expresión se materializa en la trata, el comercio de negros y en la esclavitud como método de explotación.
Al llegar africanos provenientes de diversas etnias a la Isla se hizo necesario reunir todas esas corrientes culturales, religiosas y de pensamientos en un lugar que actuara como junta o asociación, de ahí la ocupación del cabildo.
Los cabildos de nación aparecieron en Cuba aproximadamente por el año 1500, influenciados hasta cierto punto por las llamadas cofradías españolas que datan según la historiografía alrededor del siglo XIV.
El primer cabildo africano, del que se tiene conocimiento en nuestro país, es el de Shangó (Santa Bárbara en la religión católica), surgido en La Habana hacia 1568, aunque probablemente este tipo de asociaciones cobraron auge en el siglo XIX cuando el boom de la producción azucarera, y muy en especial a partir de la abolición de la esclavitud el 13 de febrero de 1880.
El hecho de adentrarse en el proceso de identidad del cubano a partir de las reminiscencias africanas, nos hace obligatoriamente investigar esta parte de la historia que aún en los umbrales de la presente centuria permanece vigente, aunque con atisbos ya propios de un país que va evolucionando sus raíces. |