Los humanos gestos de la Patria
10 de Diciembre de 2009, 1:55 p.m.

Las Tunas, Cuba.- A la joven Danaisa Rojas Ochoa, natural del municipio de Puerto Padre, a la edad de 5 años le fue diagnosticado por el Sistema de Salud Pública cubano una miopía progresiva que le ocasionó la pérdida de la visión pasada la adolescencia, por mucho esfuerzo que se hizo.

A la altura de la década de los 80, gracias a la rehabilitadora Clara Rizo Fernández de la localidad de Vásquez, Danaisa se inició en el sistema de electro escritura Braille, hasta 1996 en que es llamada para ingresar en el Centro Nacional de Rehabilitación de Ciegos y Débiles Visuales, ubicado en Bejucal, La Habana, donde, además, son atendidos niños y jóvenes de América latina:

“Ahí en esta escuela se me enseñó, además del sistema Braille, la rehabilitación integral desde las artes manuales hasta terapia ocupacional que incluyó conocimientos elementales de Electricidad, Plomería y tantos oficios como se necesitan para enfrentar los retos de un hogar”.

¿Cómo llega Danaisa a la presidencia de la Asociación de Ciegos en Las Tunas?

“En el municipio de Puerto Padre atendí diversas esferas entre las que figuran: rehabilitación, educación y cultura”.

¿Cuántas escuelas de este tipo existían en Cuba al triunfo de la Revolución?

“No existía ninguna escuela que le diera una atención especial a esta población discapacitada, en la provincia primero surgió el centro Ambliope, más adelante se inauguró la escuela provincial Ramón Téllez, dotada de tecnología de punta y todas las condiciones para asimilar la matrícula de todo el territorio, donde cursan desde la Primaria, hasta la Secundaria Básica y luego se integran a los centros de enseñanzas ordinarios.

Contamos con los medios tiflotécnicos como las regletas y punzones, máquinas Braille y algunos casetes hablados y estamos incorporados a las diversas enseñanzas, acabamos de inaugurar en la sede el más moderno laboratorio para la enseñanza de la informática a los asociados ciegos y de baja visión”.

¿Cuál es la magnitud de la membrecía?.

“Más de 400 adultos, jóvenes y niños ciegos que de una forma u otra están integrados, al igual que los mil 400 diagnosticados de baja visión”.

¿Habló usted de ciegos profesionales en diversas carreras universitarias?

“Te nombraré algunos y temo omitir muchos otros nombres, por ejemplo, Nicel Arbella Espinosa, Graduado de Estudios Socioculturales, Alexis Rodríguez Espinosa, en Ciencias Pedagógicas, Anna Álvarez en Psicología, Roberto Rodríguez Diéguez en Tecnología de la salud, entre muchos otros en grados terminales de varias carreras”.

¿Es cierto que al ciego se le desarrollan más los otros sentidos?.

“No creo exactamente que desarrollamos más, es sencillamente que aprendemos a utilizarlos, los explotamos más y le damos mucho más importancia que el resto de las personas”.

¿Danaisa Rojas Ochoa se siente útil, ocupada y recompensada?.

“Bien ocupada y bien recompensada, porque no solamente soy la presidenta del consejo, sino también soy madre, escritora, estudiante, soy amiga, compañera, mujer y por sobre todos las cosas quiero agradecer a todas las personas que me han ayudado a mi formación”.

¿Por qué usted cree que el Apóstol de los cubanos José Julián Martí Pérez dijo que el amor es el único modo de crecer?

“Porque el amor es el único modo de hacer crecer y de crecer”.

Sí los ciegos profesionales en ciencias pedagógicas, derecho, tecnología de la salud, estudios socioculturales y Psicología: Nicel, Alexis, Anna, Roberto y Noel, le hubiera tocado nacer en la seudo-república, en aquel capitalismo decadente que exacerbó el hambre, la insalubridad, el analfabetismo y el saqueo, quizás no hubieran ni aprendido a leer y a escribir nunca, pues fue el Estado cubano con la campaña de alfabetización el encargado de desplegar la primera revolución cultural de todos y por el bien de todos.