Abro mi ventana y para suerte mía, te veo otra vez en este mirador del sonido. Esta vez quiero afirmarte que jamás se irá de la memoria de cualquier cubano (viva o no en la Isla), esta voz… Bartolomé Maximiliano Moré Gutiérrez, más conocido como Benny Moré.
Espectacular cantante y compositor, Benny Moré trasciende por el amplio y privilegiado registro vocal y su capacidad innata para la composición musical que lo colocan en lo alto de la cultura cubana.

Las grabaciones del Benny trascienden en el tiempo y su vida es una leyenda. Conocido como el Bárbaro del Ritmo, en 1940, viajó a la Habana. Ya en la capital, comienza un peregrinar que duraría casi 4 años. Como muchos de su tiempo, vino a probar fortuna en la bulliciosa ciudad.
Escuche y descargue el podcast: “Desde mi Ventana”
Cuentan que se le vio deambular por el célebre barrio de Belén en La Habana Vieja, con una guitarra al hombro por cafés, bares, hoteles, restaurantes, también actuó de manera improvisada para los turistas, en los muelles del puerto.

De vez en cuando lo vieron en las noches por la Playa de Marianao, para oír cantar a Pachito Riset. Fue memorable su estancia en México con los Matamoros y Dámaso Pérez Prado con los que realizó grabaciones que hoy constituyen un patrimonio de la nación cubana, antesala de su ascenso a la inmortalidad con su Banda Gigante la cual dirigió con gracia y genial intuición para dejar grabadas en nuestras memorias sus más hermosas interpretaciones. Dueño de las legendarias noches del Alí Bar, Benny Moré viste los honores de lo cubano con su inconfundible e irrepetible voz.
