Después de imponerse en las seis primeras salidas de las rondas clasificatorias, las Morenas del Caribe no supieron encontrar la necesitada conjugación del servicio-recepción-ataque y así perdieron la oportunidad de acceder a la final 3-0 (25-15, 26-24 y 25-17) del voleibol femenino olímpico en Beijing.

Cuba derrotó con relativa facilidad a las norteñas en el segundo choque clasificatorio, pero esta vez salieron a la luz numerosas fisuras y las jugadoras no pudieron responder a los incesantes reclamos del entrenador Antonio Perdomo. Al final, las norteamericanas barrieron en tres sets con parciales de 25-20, 25-16, y 25-17 en poco más de una hora.

"Las muchachas estuvieron estupendas'', afirmó Lang, miembro del Salón de la Fama del Voleibol. "A las cubanas no se les puede dejar que tomen la iniciativa, tienes que atacarlas constantemente, impedirles que se organicen. Eso nos dio el resultado esperado''. ¿Cómo buscar una explicación a la derrota? El DT Antonio Ñico Perdomo fue bien explícito al responder la interrogante: “Jugamos muy mal y las norteamericanos aprovecharon cada uno de los errores. Vinimos a discutir la medalla de oro y no pudo ser, ahora vamos a discutir el bronce”

Tampoco Perdomo acepto la palabra frustración y dijo: “En el nivel mundial hay seis equipos de excelente calidad, entre ellos aparecen los cuatro semifinalistas, Brasil, China, Cuba y Estados Unidos, entre sí cualquiera puede ganar o perder. Hoy nos tocó caer.” Por otra parte, la capitana Yumilka Ruíz, indiscutible líder dentro del equipo señaló: “Nada nos salió bien durante todo el partido. Jugamos muy mal y a ellas si les salió todo. Fueron superiores como equipo, fue eso nada más''.

Aunque las cubanas perdieron un juego crucial y muchos están asombrados por el revés, a la hora del análisis, además de reconocer los errores propios y la calidad de las vencedoras, resulta imposible pasar por alto que por quinta ocasión consecutiva igual cantidad de ediciones discutieron medallas (tres de oro y una de bronce) y aún van a luchar por ascender al podio de premiaciones.

Esta vez la entrenadora de las norteñas, la china Lang Ping consiguió sonreír y discutirá el oro olímpico frente a Brasil, equipo vencedor de las anfitrionas. Ping fue una notable jugadora durante la década de 1980 y entonces llegaron a considerarla la mejor jugadora del mundo. Ahora retirada como atleta alcanzó el sueño de su vida: “Llegar a discutir en la final”. Bajo la mano firme y segura de Lang, el equipo estadounidense dejó atrás largos años de oscuridad para regresar a los primeros estelares.

Mientras Estados Unidos medirá fuerzas con las sudamericanas, Cuba luchará por el bronce con la fuerte escuadra china, que cayó ante el empuje de las sudamericanas.

SÍNTESIS DEL PARTIDO:
CUBA (0):
Ruiz (9),
Santos (6),
Carrillo (8),
Ramírez (7),
Sánchez (3),
Calderón (9)
Mesa (líbero) -equipo inicial-, Ortiz, Barros y Carcaces (1).

ESTADOS UNIDOS (3):
Scott-Arruda (9),
Haneef-Park (12),
Bown (2), Glass (5),
Ah Mow-Santos (1),
Tom (11) y Davis (líbero) -equipo inicial-, Berg y Willoughby (6).

PARCIALES: 20-25 (22 min.), 16-25 (22 m.) y 17-25 (23 m.).
ÁRBITROS: Frans Loderus (HOL) y Dejan Jovanovic (SRB).