La lucha por los derechos civiles en Estados Unidos mantiene su férrea batalla, por eso me parece interesante recordar hoy, por sus aportes intelectuales, a uno de los adalides de ese movimiento.

Nacido en Chicago el primero de abril de 1949 y muerto en Nueva York el 27 de mayo del 2011, Gilbert Scott-Heron fue un poeta y músico, principalmente conocido a finales de la década del 60 y principio de los años 70 por sus actuaciones de poesía cantada y hablada, relacionadas con los activistas afroamericanos. Todos dicen que su momento cumbre fue con su poema-canción: La Revolución no será televisada.

Heron pasó su infancia en Tennessee, importante sede musical en Estados Unidos, y más tarde se mudó al Bronx, donde cursó sus estudios secundarios. Tras estar un año en la Universidad de Pensilvania, se mudó a Londres para probar nuevos horizontes en el mundo de la literatura y allí publicó su primera novela, The Vulture, que fue bien recibida.

Scott Heron empezó su carrera musical en 1970 con el LP Conversando en la calle 15 y Lennox,  álbum donde incluía criterios agresivos contra los medios corporativos manejados por los blancos, la superficialidad de la televisión y el consumismo, y la ignorancia de la clase media de los Estados Unidos sobre los problemas de las ciudades del interior.

Fue tan fuerte su discurso que la banda mexicana Molotov hizo una buena versión de uno de sus temas. A pesar de sacar algunos álbumes bien elogiados, su éxito más grande llegó en 1978 con la canción «The Bottle».

Gilbert Scott Heron, que murió el 27 de mayo de 2011, es a menudo visto como uno de los padres fundadores del rap.

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