En la ceremonia que tuvo lugar este martes en el Coliseo de la Ciudad Deportiva, destacó el talento de los más jóvenes, la superación de la personas en situación de discapacidad y la consagración de estrellas del deporte cubano, como es el caso de Leyanis Pérez, única campeona mundial entre los convencionales en el actual año, también subió a lo más alto en una cita del orbe el paratleta Robiel Yankiel Sol. ´
La gala se dedicó al centenario del natalicio de Fidel y el Aniversario 67 de la Revolución. Los primeros reconocimientos fueron para las nuevas generaciones, los de la categoría juvenil donde sobresalieron la luchadora Yainelis Sanz y Carlos Rivera de béisbol 5.
Uno de los momentos más emotivo fue la premiación de los atletas paralímpicos, donde resultó la más destacada la santiaguera Suslaidy Girat de atletismo. Además recibieron reconocimientos el saltador Robiel Yankiel Sol entre los varones y la judoca Yadira Lazara Ramos en el sexo femenino.
El momento más esperado quedó reservado para reconocer a los dos mejores deportistas del año en Cuba, la pinareña Leyanis Pérez y el camagüeyano Julio C. La Cruz.
Leyanis conquistó las preseas de oro en los Mundiales bajo techo y al aire libre, mientras el experimentado púgil quien además es el capitán de los Domadores, sumó otra presea a su amplio palmarés en citas del orbe, al colgarse el metal bronceado.
En cuanto a los colectivos en el sexo femenino sobresalió la softbolista Yilian Tornés. La granmense resultó la más valiosa del Campeonato Panamericano, llevándose la triple corona del pitcheo y siendo figura fundamental en el tercer lugar del elenco cubano.
Por su parte en igual categoría entre los hombres, mereció los honores el voleibolista de playa Jorge Luis Alayo, quien subió a lo más alto del podio junto a su compañero Noslen Díaz en dos Paradas del Tour Mundial.
Uno de los principales homenajeados resultó el estelar lanzador Liván Moinelo, quien hace unas horas ganó la encuesta anual de Prensa Latina y fue premiado por la dirección del organismo deportivo como el más destacado entre los contratados y además protagonizó el suceso del año, al convertirse en el 4to latino en ser nombrado jugador más valioso de la Liga Japonesa.
La ceremonia reafirmó, una vez más, el lugar del deporte cubano como conquista y orgullo de la nación.
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