La Habana, Cuba.- Los aficionados espirituanos no aceptan de ningún modo hablar de béisbol en territorio, porque la decepción de sus representantes en la 48 Serie Nacional resulta en extremo preocupante.

Antes de comenzar la temporada, el pitcheo parecía de primera línea e incluso algunos especialistas lo consideraron a la altura del mejor, sobre todo por los abridores Ángel Peña e Ismel Jiménez.

En cuanto a la ofensiva, ahí no cabía ningún tipo de discusión posible, luego de presentar en la alineación a tres bateadores como Yulieski Gourriel, Frederich Cepeda y Eriel Sánchez, además del regreso a los predios natales del receptor Yenier Bello.

La realidad del terreno ofreció un buen inicio en la primera semana y el balance de 4-2 constituyó un buen estímulo en las aspiraciones del director Juan Castro.
Sin embargo, en las últimas ocho salidas no la vieron pasar y el descenso los llevó a compartir posiciones con los seleccionados que buscan salir a flote desde las profundidades en la tabla de posiciones.

Anoche volvió a fallar el pitcheo, ahora con revés a la cuenta del Ifreidi Coss, quien en la parte baja del quinto llevaba ventaja de 4 x 0, gracias a cuadrangulares de Yasiel Santoya y Yulieski Gourriel.

Ifreidi comenzó a dar síntomas visibles de agotamiento y dejó abierta la brecha en la parte alta del séptimo, dando lugar a que los de la Isla de la Juventud igualarán las acciones y tomaran ventaja 5 x 4.

En el noveno, los discípulos de Armando Johnson clavaron la estocada final a los derrotados y un racimo de cuatro selló el triunfo 9 x 4, con crédito victoriosos a la cuenta de Ronald García y punto por salvado para Carlos Manuel Puente.

Sancti Spíritus seguirá en suelo propio, donde recibirán a Pinar del Río en subserie a desarrollarse el fin de semana. La ocasión parece oportuna si de reacción se trata, aunque en dos de los tres compromisos tendrá como lanzadores adversarios a Vladimir Baños y el gigante Pedro Luis Lazo.