Balance anual del Ministerio de Salud Pública

Destaca Primer Ministro potencialidades de sistema de salud cubano

Durante la reunión anual de trabajo del Ministerio de Salud Pública, donde se analizó el quehacer en 2022, Manuel Marrero Cruz, Primer Ministro cubano, reconoció las potencialidades de los trabajadores en medio de las limitaciones de recursos.

Afirmó que el sector de la salud, una de las grandes conquistas de la Revolución, es uno de los que ha sufrido de forma más dura el recrudecimiento del bloqueo estadounidense, la crisis económica y la guerra mediática.

En el Palacio de la Revolución el Primer Ministro destacó el papel insustituible del médico y la enfermera de la familia, instó a realizar acciones preventivas ante brotes y enfermedades transmisibles, a perfeccionar el trabajo de Higiene y Epidemiología, reforzar la preparación ante emergencias y desastres, fortalecer la preparación profesional y la intersectorialidad.

Expresó que en estos tiempos complejos se hace necesario llegar lo más cerca posible al pueblo y acercar los servicios sanitarios a las comunidades, en especial a aquellas más distantes.

Hay que establecer prioridades y acciones diferentes para lograr los resultados, apostar por un cambio de pensamiento y por la cultura del detalle, dijo.

En nombre del Gobierno reiteró el reconocimiento y la gratitud a los profesionales por la digna labor realizada ante la COVID-19 y por su desempeño diario para proteger la salud del pueblo cubano y otros pueblos del mundo.

José Angel Portal Miranda, ministro de Salud Pública, al presentar el informe de balance anual precisó que en 2022 se priorizó la recuperación de actividades vitales y fueron implementadas acciones para atender fenómenos naturales y catástrofes.

Al analizar las deficiencias detalló que el Programa del Médico y la Enfermera de la Familia tuvo inestabilidad en el funcionamiento de consultorios y la calidad en el ingreso en el hogar.

El ministro apuntó que es prolongado el tiempo de respuesta a las emergencias por elementos organizativos y bajo coeficiente de disponibilidad técnica de ambulancias, asimismo no se cumplió con la tasa de mortalidad en menores de un año, persisten deficiencias vinculadas al riesgo reproductivo preconcepcional y un elevado índice de embarazo en la adolescencia.

La gestión hospitalaria presentó debilidades derivadas de problemas de dirección, organizativos y de recursos, y se evidenciaron incumplimientos en normas higiénico-sanitarias que condicionaron la aparición de infecciones asociadas a la asistencia sanitaria, puntualizó.

El titular de Salud Pública mencionó que ante las deficiencias mencionadas, en 2023 tienen como prioridad perfeccionar los programas del Médico y la Enfermera de la Familia y de Atención Materno Infantil, así como fortalecer la actividad de Higiene, Epidemiología y Microbiología y los procesos de formación y superación profesional.

Entre las líneas de trabajo se mantiene el perfeccionamiento de la actividad de ciencia e innovación, la gestión de los aseguramientos médicos para mejorar la calidad de los servicios, y continuar -de acuerdo a la disponibilidad de financiamiento- con el programa inversionista de reparación, mantenimiento y recuperación de la infraestructura y el equipamiento médico y no médico.

Como parte de las intervenciones María Cristina Lara Bastanzuri, directora nacional de Medicamentos y Tecnologías Médicas, urgió a utilizar los recursos de manera eficiente y a garantizar el control que debe existir sobre ellos.

Acerca de la apertura de los escenarios docentes en 2022 y el perfeccionamiento de la enseñanza a partir del intercambio con los estudiantes durante el X Congreso del Federación Estudiantil Universitaria habló Fidela Reyes Obediente, directora nacional de Pregrado.

Ileana Morales Suárez, directora de Ciencia e Innovación Tecnológica, señaló que en el pasado año durante las reuniones de los científico y expertos con el Presidente Miguel Díaz-Canel, además de la pandemia, se diálogo sobre temas y programas que marcarán el futuro de la medicina cubana.

La ciencia tiene el compromiso de acompañar los procesos para mejorar la gestión del sistema de salud, comentó.

A no descuidar las muchas lecciones que dejó la COVID-19 instó Salvador Tamayo Muñiz, coordinador del Programa de Prevención y Control de Enfermedades no Transmisibles, quien alertó sobre la condición de cronicidad y la combinación de varias enfermedades crónicas que requieren de un abordaje diferente desde el sistema de salud.

Francisco Durán García, director nacional de Epidemiología, reafirmó que la COVID-19 no se ha terminado, sino que se controló en el país gracias a las vacunas cubanas, la intervención del sistema de salud y las medidas adoptadas, sin que por ello se descuidara el Programa de Inmunización.

Fuente: Haciendo Radio

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