Caucagua es una ciudad venezolana del Estado Miranda, capital del Municipio Acevedo. Su nombre es un vocablo de raíz indígena, cumanagota y significa «aguas impetuosas». Se encuentra en una encrucijada entre Caracas, el Oriente de Venezuela, y las otras regiones de ese Estado, en las zonas de Barlovento y Valles del Tuy, además de ser un núcleo agrícola, principalmente por la producción de cacao en sus tierras fértiles.
Entre sus tradiciones, la Parranda de los Santos Inocentes de Caucagua, se celebra desde hace sesenta años cada 27 de diciembre.
Pero Caucagua es más. Allí habita una población humilde, mayoritariamente conformada por adultos mayores, con los pies pegados a la tierra, y una necesidad insoslayable de recibir servicios médicos.
La Doctora Yelienis Pérez Guerra, especialista en 1er grado de Medicina General Integral, es la Jefa del Centro de Diagnóstico Integral Caucagua, lleva más de dos años en este lugar y lo describe con conocimiento de causa.
“Tiene más de 16 mil habitantes, limita a 69 km del mar, a 27 km al este de Tacarigua de Mamporal municipio Brión, a 28 km de Guatire, municipio Zamora y a 37, 2 km de Higuerote, que pertenece al municipio Brión”, nos explica.
Sus habitantes tienen características muy particulares y acuden al CDI con varios padecimientos.
Según la Doctora Yeilenis, Caucagua tiene una población suburbana, agrícola, la producción de cacao es la principal fuente de ingreso de este lugar y los padecimientos más recurrentes son la hipertensión arterial, Diabetes Mellitus, y las enfermedades cerebro vasculares, allí existe una población envejecida de más de 60 años, pues los más jóvenes de 15 a 40 años han emigrado mayoritariamente en busca de una mejor situación económica.
Sin lugar a dudas, los servicios de la Sala de Rehabilitación Integral son de los más demandados, debido al alto número de pacientes con accidentes cerebrovasculares.
“Es una sala con mucha resolutividad, con muchos pacientes con secuelas de enfermedades cerebro vasculares, hemiplejias, paraplejias. La principal causa de ello es la cultura alimentaria, se consume mucha harina, dulces, grasas, y esta conducta se ha venido erradicando paulatinamente a partir de nuestras charlas e intercambios, tampoco se acostumbraba a aplicar el tratamiento medicamentoso, ya que no todos los pobladores tenían acceso a estas medicinas, algo que comienza a mejorar con la entrega de medicamentos en los CDI”, señala.
Y puntualiza que esta Sala de rehabilitación cuenta con ocho servicios activos, entre ellos, fisiatría, logopedia o foniatría, terapia ocupacional, masaje, calor infrarrojo, podología, gimnasio, por lo cual aquí se reciben habitantes de toda la región.
Acudir allí ha resultado de muchos beneficios para los habitantes de Caucagua.
Según la especialista, “Desde mi estancia en la misión, hace 29 meses, con este servicio se ha mejorado la calidad de vida de esos pacientes, y disminuye la prolongación de la afectación por la enfermedad, con el trabajo del fisiatra y los rehabilitadores que están cada día con ellos”.
El CDI de Caucagua ofrece 14 servicios para los pobladores de esa zona enclavada en parajes de difícil acceso, entre ellos, consultas de Cuerpo de Guardia, Electrocardiogramas, Ultrasonografía, Endoscopia, Oftalmología, Rayos X, Estadísticas, Laboratorio Clínico, Laboratorio SUMA y Esterilización, Enfermería y Apoyo vital, asimismo, ingresos en una sala de medicina y otra de terapia.
Los especialistas cubanos que allí laboran, no sólo atienden a sus pacientes en el centro, sino que llegan a las comunidades, y puerta a puerta de cada hogar visitan a los ciudadanos en jornadas de trabajo comunitario integrado.
Según confirma la Jefa de este CDI, en general hay mucha aceptación de la población de los servicios médicos que se ofrecen, incluso se ha logrado más conciencia de la ciudadanía de cambiar sus hábitos alimentarios en nombre de la salud y también se comprende la importancia de recibir el tratamiento farmacológico requerido para disminuir las enfermedades. “Esta es una brigada muy unida, con 26 colaboradores, que seguimos trabajando mucho para resolver los problemas que se presenten, sacar adelante la institución y batallar por la salud de nuestros hermanos”, puntualiza.
Para la Doctora Yelienis Pérez Guerra, esta, su segunda misión, ha sido un aprendizaje.
Según confiesa “Como profesional me ha aportado mucho, yo tengo una misión anterior en Brasil, y esta estancia en Venezuela me ayudado a crecer como persona, como profesional, siento que se me ha abierto el diapasón al mundo exterior, a ver las enfermedades que en Cuba están erradicadas, lo cual me ha exigido estudiar mucho, definitivamente, he crecido personal y profesionalmente”.
Así, en Caucagua, médicos cubanos siguen librando cada día, la batalla por la salud del pueblo venezolano.
Detalles en la propuesta radial.