En Miranda, garantizar los servicios estomatológicos y poner en alto el nombre de Cuba

En el Estado venezolano de Miranda los colaboradores cubanos trabajan con mucho esfuerzo en el cuidado de la salud bucal de la población, a pesar de que faltan insumos y el completamiento de la plantilla de un personal que necesita de mucha especialización.

La Doctora Dolores Elizabeth Lugo Guerrero, de Santiago de Cuba, con solo 29 años, tiene la alta responsabilidad de Asesora de Estomatología en ese territorio, y explica todos los pormenores  sobre las acciones que se acometen para mantener y elevar la calidad de estos servicios.

“Miranda tiene 93 servicios estomatológicos, y en estos momentos estamos reorganizando los mismos, para atender a un número mayor de pobladores, contamos con 100 sillones, y aquí laboran 48 odontólogos, cuya razón principal es elevar la calidad y atender con todos los requerimientos a quienes lo necesiten, cumplimos todas las tareas y misiones asignadas, incluso participamos en jornadas de salud para llegar a las comunidades más apartadas”, explica.

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Para ella, asumir la Asesoría de la especialidad en un Estado tan grande, a pesar de su juventud, es un gran desafío que ha sabido cumplir con mucho orgullo y dedicación.

“Estar al frente de este servicio en Miranda es una gran responsabilidad, nos impone muchos desafíos, pero lo hacemos con mucho placer, porque somos un equipo muy unido y con sentido de pertenencia, nos faltan insumos pero buscamos alternativas, nuestra mayor satisfacción se ver la sonrisa de los pacientes, porque es un servicio muy demandado”, aclara.

En los jóvenes colaboradores se depositan importantes tareas, ellos son Jefes de programas, de Centros de Diagnóstico Integral, son la continuidad. Eso lo sabe muy bien la Doctora Dolores Elizabeth, quien asevera que “más del 50 % de los odontólogos son jóvenes y son ejemplo, nuestro Comandante en Jefe siempre confió en nosotros y no le fallaremos. En nosotros se puede confiar siempre, las revoluciones las hacen los jóvenes, y a nosotros corresponde mantener el legado de la obra que han puesto en nuestras manos”.

Ella siente mucha satisfacción de una historia personal y familiar que la enaltece cuando representa en otras tierras hermanas, el nombre de Cuba.

Mi principal función y la de mi equipo es garantizar la salud bucal de la comunidad, y aunque dirijo, también atiendo a los pobladores en las jornadas de salud, siempre participo con los estomatólogos en esos intercambios con el pueblo, yo vengo del seno de una familia revolucionaria, integrada, que me transmitió valores, y siempre dialogo con mis compañeros sobre lo que representamos aquí, nosotros somos Cuba y así nos llaman los propios pacientes, eso nos hace comprometer más, porque simbolizamos la imagen y el prestigio de nuestra Isla”, concluye emocionada.

Detalles en la propuesta radial.

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