Una llave de Lisboa para Cuba, que enaltece y honra

Lisboa, Portugal-Durante la visita de Estado que el Presidente de Cuba Miguel Díaz-Canel Bermúdez realiza a Portugal, la agenda de este viernes dio espacio para otros significativos encuentros; entre ellos, la llegada del mandatario cubano hasta la sede de la Asamblea de la República de este país ibérico, donde tuvo como anfitrión al Presidente del parlamento luso, Augusto Santos Silva.

Luego de recibir los honores correspondientes a la entrada de la majestuosa edificación de estilo neoclásico, declarada como Monumento Nacional desde el año 2002, el Jefe de Estado cubano escribió en el Libro de Honra:

«En ocasión de mi primera visita oficial a la República Portuguesa, me complace visitar la sede de la Asamblea de la República, sede del poder legislativo de este gran país. Compartir con el presidente de la Asamblea y otros diputados, nos ha permitido reafirmar la voluntad de desarrollar nuestros vínculos bilaterales, basados en la historia de amistad e intercambio entre nuestros pueblos».

De igual manera, subrayó: «En nombre del Presidente de la Asamblea Nacional del Poder Popular de la República de Cuba, de sus diputados y del pueblo de Cuba, transmito un saludo afectuoso a los diputados, a quienes agradecemos las renovadas muestras de solidaridad hacia la Revolución cubana». 

En el encuentro también participaron los miembros de la delegación oficial que integran el ministro de Relaciones Exteriores Bruno Rodríguez Parrilla, así como otros representantes del gobierno y la cancillería. Estuvieron presentes, además, líderes de partidos políticos de Portugal y miembros del grupo parlamentario de Amistad con Cuba.

La jornada se cerró en la Cámara Municipal de Lisboa, donde el Presidente Díaz-Canel recibió la Llave de Honor de la Ciudad, con la cual se distingue a reconocidas personalidades, instituciones, organizaciones nacionales o extranjeras,por su prestigio, posición, acción o relación muy especial con la capital portuguesa.

«Noshonra y enaltece este símbolo, porque abre la puerta de Lisboa, reconocida como uno de los grandes centros culturales europeos, punto de partida y de encuentro de las más diversas culturas desde los orígenes del mundo”, dijo el Jefe de Estado ante la delegación oficial y el cuerpo diplomático invitado para la ocasión.

Fotos: Presidencia Cuba

En sus emotivas palabras, el dignatario destacó la impronta de esta maravillosa Ciudad de las Siete Colinas que tiene muchas resonancias en Cuba; de sus huellas en la arquitectura nacional y en numerosas tradiciones populares; de la devoción de muchos cubanos por la Virgen de Fátima y por San Antonio; así como del asiento permanente o temporal que ha sido Lisboa para incontables compatriotas, quienes han formado parte de la vida económica, cultural y académica de la ciudad, sin perder su cubanía.

Al recibir este símbolo, el mandatario expresó «los mayores deseos de felicidad para los lisboetas, y de prosperidad para la ciudad de Lisboa, cuya llave me honrará llevar, como prueba de afecto, a mi amada Cuba”.

El sentido agradecimiento del Jefe de Estado cubano estuvo antecedido por la intervención de Carlos Moedas, presidente de la Cámara Municipal de Lisboa, quien afirmó que «las relaciones entre los dos países tienen un pasado, se hacen de un presente y tendrán un futuro».

En ese sentido, enfatizó que «queremos continuar trabajando con vosotros, con vuestro talento, y ustedes pueden continuar contando con el talento de Portugal».

«Son todas estas razones, y otras tantas», aseveró, para “darle hoy algo muy especial que damos a personas muy especiales, y es hacerlo ciudadano de Lisboa, dándole la llave de esta ciudad con un gusto muy grande de tenerlo aquí y un honor enorme”.

En la sede de la Cámara Municipal de Lisboa, en el salón desde cuyo balcón se declaró la independencia de la República Portuguesa hace más de un siglo, el Presidente de Cuba Miguel Díaz-Canel Bermúdez recibió la Llave de Honor de la ciudad más añeja de la nación lusa, que cuenta con una de las historias más antiguas de Europa.

Esta distinción es un galardón municipal que consiste en una llave dorada. Su otorgamiento se delibera en una sesión ordinaria de la Cámara Municipal de esta histórica y bella ciudad, a la que unen grandes lazos de amistad con Cuba.

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